Las redes sociales ofrecen a las
organizaciones de salud la oportunidad para difundir la información médica
precisa que la gente necesita. El uso de las redes sociales en medicina
facilita el diálogo médico-paciente, no un monólogo en el que el profesional
habla sin esperar respuesta. Estas
herramientas favorecen la escucha activa de la voz de los pacientes y entender
lo que es importante para ellos. A menudo las personas se muestran renuentes a
hablar con sus familiares o amigos acerca de sus problemas de salud. Debido
a que muchas de las barreras tradicionales para la búsqueda de ayuda se reducen
considerablemente en Internet, la red se está convirtiendo en el lugar donde la
gente realiza más consultas sobre salud.
Así mismo, existen personas que utilizan las redes sociales como una
herramienta de motivación para ayudar a alcanzar sus objetivos de salud, tales
como dejar de fumar, bajar su presión arterial, controlar el colesterol, bajar
de peso o comenzar un plan de ejercicios. Al anunciar una meta a través
de las redes sociales y hacer publicaciones regulares sobre ella, las personas
se vuelven responsables ante los demás y tienen más probabilidades de lograr lo
que se propuso hacer.
También ayuda a la investigación médica. Los profesionales médicos utilizan
sitios de redes sociales para recopilar datos y reclutar participantes para
estudios de salud. Los médicos pueden recurrir a un buen número de comunidades
en línea para así estar enterados de los nuevos avances tecnológicos que van de
la mano con el avance de la medicina.